El huerto de Lucas es un proyecto de rehabilitación en el que hemos aplicado criterios de arquitectura biosaludable con especial cuidado en el uso de materiales constructivos libres de tóxicos.
Este espacio de más de 450 metros
cuadrados, está ubicado en una antigua panificadora, en la calle San
Lucas nº 13, en el barrio de Chueca.
"La primera medicina es el alimento"
El mercado es un proyecto familiar, dedicado al cuidado de la salud y el medio ambiente a través de la alimentación. La "ideóloga" del proyecto, Pilar Muñoz-Calero, dirige la Fundación Alborada, dedicada al desarrollo y divulgación de la medicina ambiental, y al tratamiento de enfermedades como la Sensibilidad Química Múltiple.
El mercado es un proyecto familiar, dedicado al cuidado de la salud y el medio ambiente a través de la alimentación. La "ideóloga" del proyecto, Pilar Muñoz-Calero, dirige la Fundación Alborada, dedicada al desarrollo y divulgación de la medicina ambiental, y al tratamiento de enfermedades como la Sensibilidad Química Múltiple.
El
espacio incorpora una cantina orgánica
a cargo del chef Javier Muñoz-Calero, quien anuncia una “cocina honesta con ingredientes de
mercado” que se podrán disfrutar en el propio mercado o en su
versión take away. Su primo, Alejandro Muñoz-Calero, estará al frente de la gerencia del mercado (los tres en la imagen).
El MercadoEl espacio central se organiza en torno a una plaza de abastos, a nivel de calle, en la que todos los puestos han sido cuidadosamente seleccionados, con la garantía de que sus productos son 100% orgánicos. A los puestos tradicionales como panadería, carnicería o frutería se suman un “puesto de temporada”, que según la época del año estará ocupado por productos como algas, setas o castañas, y una “tienda de producto seco” con cereales, productos envasados, conservas y bodega.
La plaza es un espacio cambiante que durante el día estará ocupado por las mesas de la cantina para servir un menú y poder disfrutar de cualquier producto de los puestos. El mobiliario se puede retirar o mover para albergar eventos temporales como charlas, mercadillos "pop-up", presentaciones y talleres.
Porque somos lo que comemos pero también lo que tocamos, olemos, vemos y oímos.
Desde el proyecto arquitectónico, El Huerto de Lucas está diseñado para potenciar la salud y el bienestar, a través de los cinco sentidos.
Es un espacio construido para personas que se cuidan y que cuidan de su entorno. Donde el ciclo de vida de la naturaleza pueda encontrar un hueco en medio de la gran ciudad, a través del reciclaje, compostaje, purificación del agua, captación solar, y estrategias de construcción sostenible.
En las próximas semanas hablaremos de los secretos de la obra, los materiales ecológicos empleados en su construcción y las estrategias de bioconstrucción de El Huerto de Lucas.
¿te interesa la comida orgánica? ¿crees que son necesarios más espacios como éste en la ciudad? Cuéntanos lo que piensas, y si te ha gustado este post, te invitamos a que lo compartas en tus redes sociales.
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